lunes, 10 de agosto de 2020

Dios obra en todo tiempo

2 de Corintios 12: 9-10 Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.

El apóstol Pablo escribió a los Corintios dándoles su testimonio de como a pesar de estar atravesando una experiencia dolorosa, a la que denomino aguijón, que podríamos definir como algo que nos causa problemas y nos aflige, y de cómo en medio de esa situación pidió a Dios que se lo quitara y la respuesta del Señor fue que le bastara Su gracia, es decir que confiara en Él, porque no debemos enfocarnos en las tribulaciones que pasamos porque Jehová siempre es suficiente en todo y para todo. Por ello cuando somos débiles nuestro Dios nos mostrara Su poder y gloria, ya que Su gracia permanece para siempre.

Con la situación actual de la pandemia del Covid -19, la humanidad está aprendiendo cuan débil es y lo mucho que necesita de Dios y es ahí donde nuestro Padre Celestial nos muestra que Él está disponible en todo tiempo para ayudarnos, siendo la primera gracia que Dios nos regaló la salvación de nuestras vidas en Cristo Jesús. 

Ante una crisis tenemos dos opciones de como afrontar la misma, algunos son orgullos y auto-suficientes confían en sus propias fuerzas, más los que entregamos nuestra vida a Jesús declaramos como dice Zacarías 4:6 No es por la fuerza ni por ningún poder, sino por Su Espíritu Santo.

Es por ello que ante toda circunstancia caminamos confiados de que Jehová obrara a nuestro favor y podemos ver Su gloria, mientras otros se preguntan ¿Dónde está Dios? Nosotros sabemos dónde Él esta, en nuestros corazones y por ello es que podemos estar en plenitud de gozo.

Que nos permite una crisis a los que amamos a Jehová, como dice en Romanos 8:28.

1.    Nos acercamos más a Dios. Nuestra relación se hace mucho más íntima y le conocemos más.

2.    Vivimos en abundancia porque reconocemos que dependemos de Él.

3.    Tenemos Su paz que sobrepasa todo entendimiento.

4.    Nuestra fe esta activa y nos mantiene confiados.

5.    La oración se vuelve un modo de vivir.

6.    Nos sustentamos y declaramos Su palabra.

7.    Tenemos testimonio de Sus propósitos, promesas y milagros cumplidos.

8.    Se desatan los dones y talentos para Su gloria y obra.

9.    Compartimos Su amor. Damos por gracia lo que por gracia hemos recibido.

10.  Le alabamos y adoramos confiados porque sabemos que Jehová tiene el control.

En este tiempo se nos está manifestando la pronta venida de nuestro Señor Jesucristo. Por lo cual como hijos e hijas debemos procurar ser como las doncellas prudentes y llenar nuestras lámparas de aceite para que como siervos de Dios anunciemos Su palabra y demos testimonio para que la mayor cantidad de personas que nos escuchen puedan conocer y volverse al Padre Celestial.  Si tu  quieres vivir bajo la gracia de Dios, te invito a que aceptes a Jesús como tu Señor y salvador. Este es el tiempo de Dios.

Bendiciones para todos y todas.

 

Ana Yajaira Pérez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario