Mateo 26:1-56 RVR1960
En este capítulo, se nos presenta a Jesús en su periodo previo a la
crucifixión, en el versículo 2, se
nos dice: Sabéis que dentro de dos días
se celebra la pascua, y el Hijo del Hombre será entregado para ser crucificado.
En este anuncia a sus discípulos
todo lo que acontecería y como ellos reaccionarían a dicha situación, esto no
para asustarlos, sino para que confiaran de que todo se desarrollaría de
acuerdo a lo dicho por los profetas que estaba alineado a la voluntad y plan de
Dios.
Cristo tuvo que enfrentar la conspiración de los
principales sacerdotes, escribas, y ancianos, líderes religiosos del pueblo,
los llamados a guiar a otros a Dios, en el versículo
4 se nos revela que, tuvieron
consejo para prender con engaño a Jesús, y matarle. Esto porque se
sentían amenazados por las acusaciones que Cristo les hacía, las cuales les
condenaban en cuanto a su modo de actuar.
También en este tiempo recibió reconocimiento y
honra, en el versículo 7 vemos que: vino a él una mujer, con un
vaso de alabastro de perfume de gran precio, y lo derramó sobre la cabeza de
él, estando sentado a la mesa. Ella lo ungió como escogido por
Dios, a quien le esperaba desempeñar una tarea importante.
Celebro la cena de la pascua, compartiendo el pan
y vino con sus discípulos, pero haciendo énfasis en cada uno de estos
elementos, especialmente en el vino como dice el versículo 28 porque esto es
mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los
pecados. En esta representación de
Su sangre, se establece como señal que constituye el nuevo pacto de gracia y
amor con la humanidad para brindar libertad, salvación y vida eterna.
Jesús sabía todo lo que vendría, ya que en su
naturaleza humana sufrió en gran manera aflicción, pero busco a través de la
oración, a quien solo podía darle consuelo, el Padre Celestial, manifestando
siempre su fidelidad al cumplimiento de la voluntad de Dios. Como se nos indica
en el versículo 38: Entonces Jesús les dijo:
Mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí, y velad conmigo.
Cristo nos da un ejemplo de confianza en Dios, pues cada vez que estemos en un
momento de aflicción que no podamos enfrentar debemos procurar buscar a Dios y
velar con la oración para que nuestro enemigo el diablo no saque provecho de
nuestras circunstancias.
Cuando termina de presentarse ante Dios, recibe
otro golpe a su corazón ya triste y agobiado, es entregado a sus enemigos por
Judas, lo vemos en el versículo 49: Y en
seguida se acercó a Jesús y dijo: ¡Salve, Maestro! Y le besó. Que tristeza
uno de los suyos, uno de sus discípulos, le traicionaba. Entonces fue apresado bajo una gran mentira y
despliegue militar, lo cual origino el abandono de sus seguidores, aquellos que
habían estado con él durante su ministerio. Muchas veces te podrás sentir decepcionado,
triste y solitario, pero siempre recuerda que no estás solo, Cristo también enfrento
estos mismos sentimientos y sufrimiento, y él entiende por lo que puedes estar
pasando y por ello se encuentra a tu lado y nunca te dejara solo.
Concretado el apresamiento, la palabra dada a
Pedro en el versículo 34: Jesús le dijo: De cierto te digo que esta noche, antes que el gallo
cante, me negarás tres veces. Esta se
cumple y si, es negado por quien fuera uno de sus más cercanos colaboradores, y
con esto se confirma que todo lo que había anunciado sobre su muerte se
cumpliría para la gloria de Dios. Por lo cual, Jesús es el cumplimiento vivo
del plan de Dios para nuestras vidas.
¡¡¡¡¡ALELUYA!!!!!
Dios les bendiga en abundancia siempre.
Ana Yajaira Pérez
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