miércoles, 25 de junio de 2025

No Temas, Cree Solamente. (Marcos 5:36 RVR1960)

 Marcos 4: 35- 41 RVR1960.

Al atardecer, Jesús dijo a sus discípulos: «Crucemos al otro lado del lago».  Así que dejaron a las multitudes y salieron con Jesús en la barca (aunque otras barcas los siguieron).  Pronto se desató una tormenta feroz y olas violentas entraban en la barca, la cual empezó a llenarse de agua.

Jesús estaba dormido en la parte posterior de la barca, con la cabeza recostada en una almohada. Los discípulos lo despertaron: «¡Maestro! ¿No te importa que nos ahoguemos?», gritaron.

Cuando Jesús se despertó, reprendió al viento y dijo a las olas: «¡Silencio! ¡Cálmense!». De repente, el viento se detuvo y hubo una gran calma.  

Luego él les preguntó: «¿Por qué tienen miedo? ¿Todavía no tienen fe?».

Los discípulos estaban completamente aterrados. «¿Quién es este hombre? —se preguntaban unos a otros—. ¡Hasta el viento y las olas lo obedecen!».

En la historia leída podemos ver varios aspectos importantes en los que debemos reflexionar:

-     Crucemos al otro lado, plantea una oportunidad de hacer algo nuevo, esto que conlleva de nosotros un accionar y nos crea expectativas.

La barca representa nuestras vidas y para que Jesús este en tú la barca es porque le has aceptado como Señor y Salvador, sino lo haz hecho tu barca está en el mar de este mundo roto sin el capitán, ancla y timón. 

Las tormentas, fuertes vientos, procesos, atribulaciones, problemas suelen siempre azotar nuestra vida, nuestra barca.

 El hijo de Dios dormía, Cristo estaba tranquilo y en paz, porque sabia quien era, los que aún no entendían quién era él, fueron los que estaban a su lado. Pero en la historia el versículo que más llamo mi atención cuando leí el pasaje bíblico fue el 40, que dice: Luego él les preguntó: «¿Por qué tienen miedo? ¿Todavía no tienen fe?».

Considero que estas son preguntas muy fuertes hechas por Cristo a quienes estuvieron a su lado cada día de su ministerio y a nosotros que le tenemos en nuestro corazón y vida como Señor y Salvador, al cuestionarnos por el temor y por nuestra fe, es algo que debe llevarnos siempre detenernos a reflexionar en los momentos de tormenta que enfrentemos, ya que el temor nos impide avanzar y para poder superarlo, Cristo nos señala que debemos hacerlo con fe

 ¿Qué es?

Temor: Pasión del ánimo, que hace huir o rehusar aquello que se considera daño, arriesgado o peligroso.

Miedo: Angustia por un riesgo o daño real o imaginario.

Angustia: Aflicción, congoja, ansiedad.

El hombre a lo largo de su vida vive enfrentando sus temores o lleno de ellos.  La primera vez que el hombre enfrenta el temor o miedo está en Genesis 3:10 RVR1960 Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí.  El haber pecado contra Dios llena nuestras vidas de temor y El Padre no nos creó para que tuviéramos miedo de Él, sino para que le amemos, adoremos y honremos.

Ahora bien, la manera en cómo afrontamos el temor a la tormenta, ya sea a que nos volteé o hasta hunda la barca, es lo que nos ayudara a pasarla o nos hará daño y lastimara. Las personas delante de las tormentas suelen pensar que es mejor estarse tranquilos y esperar que la tormenta simplemente se calme a su ritmo natural, pero lo que suele ocurrir es que arrecia.  Otros por el contrario creen que, tomando medidas previsorias, como amarrar la barca o tirar el ancla, impedirán que la tormenta no cause daños, ni estragos, pero desafortunadamente suele ser lo contrario y están los que reconocen que el capitán es Jesucristo, quien puede llevar la barca a puerto seguro, se dirigen a Él, le despiertan y le entregan su vida.

Lo primero que debemos hacer delante del temor a las tormentas, desiertos y batallas que se levanten y tengamos que enfrentar es poner nuestra fe y confianza en Dios, como estas escrito en el Salmo 27:1 RVR 1960 "El SEÑOR es mi luz y mi salvación; ¿a quién temeré? El SEÑOR es la fortaleza de mi vida; ¿de quién tendré temor?"

No es por nada que los que confían en Dios, en momentos de temor, miedo, angustia, ansiedad, frustración, afán, buscan en familiares, amigos, hermanos o personas conocidas, apoyo en la oración porque están convencidos de dos cosas: primero que Dios escucha las oraciones y obrara a nuestro favor, y segundo que la unión hace la fuerza, estar puestos de acuerdo con otros en oración abre los cielos, como está escrito en Mateo 18:19 RVR 1960.

En la palabra de Dios, también encontramos fortaleza para nuestras vidas. Sabes que la única palabra que está escrita 365 veces en la biblia es NO TEMAS, esto es para que recordemos cada día que el temor no tiene razón de ser en nuestras vidas, porque contamos con el Dios que todo lo puede, hacedor de maravillas, milagros e imposibles, Dios de Victoria. Lo hermoso de que Dios nos recuerde cada día esta frase, es que la misma suele estar seguida de una promesa o una palabra de motivación a perseverancia en la fe, una muy hermosa es la que dice en Isaías 41:10 RVR 1960 “No temas, porque yo estoy contigo; no te desanimes, porque yo soy tu Dios. Yo te fortaleceré y te ayudaré, yo te sostendré con mi mano derecha".

Otros versículos hermosos que nos infunden aliento de parte de Dios frente al temor son:

Salmo 4:8 RVR1960 En paz me acostaré, y asimismo dormiré; Porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado.

2 Timoteo 1:7 RVR 1960

“Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”.

 Juan 14:1 NTV

“No dejen que el corazón se les llene de angustia; confíen en Dios y confíen también en mí.”

 Romanos 8:15 RVR 1960

“Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre! “

 Salmo 34: 4 RVR 1960

“Busqué a Jehová, y él me oyó, Y me libró de todos mis temores.”

 1 Juan 4:18 NVI

“En el amor no hay temor, sino que el amor perfecto echa fuera el temor. El que teme espera el castigo, así que no ha sido perfeccionado en el amor.”

Hay dos cosas que establece la biblia que debemos temer en nuestras vidas, el primero es el temor a Dios, pues el resultado es la sabiduría. Proverbios 9:10 RVR 1960. Sabiduría para poder vivir, administrar nuestras bendiciones, obedecer la voluntad de Dios y sus mandatos, en fin, el puerto seguro para nuestra barca. Por eso, tampoco debemos tener temor de compartir lo que Dios ha hecho en nuestras vidas en Cristo Jesús y Su Espíritu Santo.

Lo segundo que debemos temer es perder nuestras almas, ya que cuando se deja de lado la vida espiritual y se pierde la salvación de nuestras almas, se renuncia también a las promesas eternas que Dios ha preparado para sus hijos. En Mateo 10:28 RVR 1960 dice:  Y no temáis a los que matan el cuerpo, más el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno.

En síntesis, la palabra de Dios nos manda a enfrentar nuestros temores con fe, que es la manera de vivir del cristiano, como estable en Isaías 41: 13 RVR 1960 Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo. Su presencia y ayuda nos dan la confianza necesaria para que delante de cualquier situación que enfrentemos, sepamos que seremos victorioso en aquel que nos amó, Nuestro Señor y Salvador, Jesús.

 

Dios les bendiga en abundancia siempre. 


https://youtube.com/live/3b8Ci40NgAc?feature=share

 

Ana Yajaira Pérez.

martes, 15 de abril de 2025

Bendiciones en Cristo para nuestras vidas

 

Isaías 53: 5 RVR 1960.

Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.

Isaías uno de los profetas mayores, también llamado el profeta mesiánico porque la mayoría de sus profecías se referían al Mesías, el Cristo prometido por Dios para la Salvación eterna del hombre de sus pecados. El versículo que leímos establece tres bendiciones que la crucifixión le brindo al hombre por Cristo Jesús:

 

1.    Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados.

Jesús en su condición de hombre fue limpio y sin pecado, pero sufrió la paga de nuestros pecados que es la muerte, la cual venció porque es Dios, por lo cual resucito al tercer día, brindándonos la bendición de la esperanza en la resurrección en Él y la vida eterna.

 

2.    el castigo de nuestra paz fue sobre él.

El hombre estaba apartado de Dios por su desobediencia y pecado, y aunque Dios es amor, también es justo y Su justicia sobre nosotros debía de cumplirse, por ello Jesús cargo sobre si todo el peso de la justicia de Dios para darnos el acceso que habíamos perdido por nuestros pecados, haciendo la paz con el Padre Celestial por cada uno de nosotros, por eso la paz de Cristo nuestras mentes y corazones son guardados en ÉL.

 

3.    y por su llaga fuimos nosotros curados.

Jesús antes de llegar a la cruz padeció latigazos, le pusieron una corona de espinas, ya en la cruz fue traspasado por una lanza y cada una de esas heridas representan la sanidad que Cristo nos da, no solo a nivel físico, sino también espiritual, emocional y mental.

En fin, con su muerte en la cruz, hemos sido más que bendecidos, ya que también hemos sido justificados delante de Dios, recibido salvación de nuestros pecados, hechos hijos de Dios y se nos ha permitido acercarnos al trono de la Gracia por todo y más Cristo es nuestra mayor bendición.


Dios les bendiga en abundancia a todos.



Ana Yajaira Pérez.

  

 


lunes, 17 de febrero de 2025

PERDIDOS Y ENCONTRADOS

 

Lucas 15: 1-7 NTV.  Parábola de la oveja perdida.

Los cobradores de impuestos y otros pecadores de mala fama a menudo venían a escuchar las enseñanzas de Jesús.  Por eso los fariseos y los maestros de la ley religiosa se quejaban de que Jesús se juntaba con semejantes pecadores, ¡y hasta comía con ellos!

Entonces Jesús les contó la siguiente historia: «Si un hombre tiene cien ovejas y una de ellas se pierde, ¿Qué hará? ¿No dejará las otras noventa y nueve en el desierto y saldrá a buscar la perdida hasta que la encuentre?  Y, cuando la encuentre, la cargará con alegría en sus hombros y la llevará a su casa.  Cuando llegué, llamará a sus amigos y vecinos y les dirá: “Alégrense conmigo porque encontré mi oveja perdida”.  De la misma manera, ¡hay más alegría en el cielo por un pecador perdido que se arrepiente y regresa a Dios que por noventa y nueve justos que no se extraviaron!

Nuestro Señor y Salvador Jesucristo solía predicar al pueblo de Israel en parábolas (Historias ficticias para enseñar), las cuales en muchas ocasiones eran metáforas (comparación donde se le transmite cualidades de una cosa a otra) estas eran entendibles para el pueblo de Dios pues hacían referencia a su diario vivir. Desde sus inicios los Judíos habían sido pastores de rebaños y sobre todo de ovejas y cabras. En la parábola que leímos es una de las más conocidas en la que Cristo utiliza este oficio para comprar la salvación y enseñarnos lo valiosos que somos para Dios.

 -       Esta parábola nos permite ver varias cosas:

La primera la irresponsabilidad de los fariseos y los maestros de la ley, quienes eran los responsables de llevar al pueblo la palabra de Dios, criticaban a Cristo por hacer lo que a ellos le correspondía, pero que no cumplían. Hoy tú y yo somos los responsables de que otros conozcan a través de nosotros el amor de Dios en Cristo Jesús.

Segundo el hermoso amor del pastor, nuestro Señor y Salvador, que refleja su propósito para con cada uno de nosotros mostrándonos la voluntad de Dios. Ya que la oveja por sí sola no podía volver, pues no tenía la capacidad de regresar, sino fuera por la disposición del pastor de ir a buscarla hasta encontrarla, si bien esto le tomara el tiempo que fuera necesario, nunca se dio por vencido, sino que persevero en la búsqueda y llego a tiempo al rescate de la oveja. En Ezequiel 34:11 NTV, Esto dice el Señor Soberano: yo mismo saldré a buscar a mis ovejas y las encontraré. Vemos que esto es una promesa de Dios para Su pueblo.

Por otro lado, aun que el pastor salió a buscar esa oveja, no descuido a las demás, sino que las dejo en lugar seguro para poder realizar la labor de salvación pues por Su Amor, Bondad y Misericordia, no podía dejar sola aquella que lo necesitaba. Los pastores de ovejas se caracterizan por cuidar de ellas, defenderlas y protegerlas. Los buenos pastores son diligentes, confiables y valientes. Por eso el salmista en el Salmo 23: 1 RVR1960 nos dice, Jehová es mi pastor; nada me faltará. La experiencia como pastor del rey David, le permitió conocer a Dios a un nivel extraordinario como nuestro Pastor Verdadero.

La oveja que, aunque estaba perdida, para ella no lo estaba, sino que se sentía libre, dueña de la pradera y los bosques, y no reconocía que necesitaba ser encontrada y salvada, además de estar en un grave peligro, por el pecado y la pérdida de su alma. El pecado en nuestras vidas nos vuelve ciegos y no lo vemos como en realidad es, sino que para nosotros estamos viviendo la vida que queremos y merecemos, un autor cristiano plantea que nunca reconocemos que somos pecadores y como resultado de este tenemos un mecanismo de defensa que nos resguardará de cada acusación, pero la realidad es que nos encontramos en total desobediencia a Dios.

De ahí que el hombre y el libre albedrio con la libertad de decidir y escoger, nos da también los resultados, la responsabilidad y consecuencias de la elección que hayamos hecho. Cuando lo que Dios quiso al darnos la oportunidad de elegir fue que lo escogiéramos siempre a Él, ya que no quería imponerse, sino que fuera una decisión de amor, completamente consciente y de nuestra absoluta voluntad, pues así es como se establece una relación verdadera.

El encuentro de la oveja con el pastor, la alegría del pastor por haberla encontrado, el ponerla sobre sus hombros, indica: cuidado, protección, ayuda, reconfortamiento, pero sobre todo amor. En Ezequiel 34:15 NTV, dice: Yo mismo cuidaré de mis ovejas y les daré un lugar para que se recuesten en paz, dice el Señor Soberano. Mientras que para la oveja el ser encontrado es reconocer que sola no puede seguir y que necesita de los cuidados y el amor que el pastor le ofrece.

Esta historia nos muestra que en toda situación hay dos posiciones que suponen un rol importante. Nosotros nos perdemos por el pecado y no engañamos con las mentiras del mundo de que, si no hago nada malo a nadie, eso es suficiente, y no necesito que se cumpla en mi el plan eterno de Dios de la Salvación en Cristo Jesús, pero en Lucas 19:10 RVR1960. Dice Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. A ti y a mí.

Lo más hermoso de toda la historia es la comparación de la alegría que Dios siente cuando uno de los suyos reconoce que está perdido y se vuelve a Él, la celebración de este hecho en los cielos, en el corazón de Dios y la vida del hombre, es algo tan maravilloso y hermoso que llenan nuestros corazones de esperanza y gozo. Pues estamos donde pertenecemos como rebaño de Dios, estamos en sus atrios.

Dios utiliza Su palabra en base a las experiencias de vida que tú has tenido. Hay quienes alguna vez quizás se perdieron en alguna salida con sus padres o han perdido algo o alguien, la sensación de pérdida o sentirse perdido es algo muy frustrante, que nos llena de temor y tristeza.  A nuestro Dios debe sentirse también muy triste, cuando un hijo o hija suya se aparta del propósito y los planes que Él hizo para su vida.

Uno de los yo soy de Cristo es el buen pastor Juan 10:11-16 NTV: » Yo soy el buen pastor. El buen pastor da su vida en sacrificio por las ovejas.  El que trabaja a sueldo sale corriendo cuando ve que se acerca un lobo; abandona las ovejas, porque no son suyas y él no es su pastor. Entonces el lobo ataca el rebaño y lo dispersa. El cuidador contratado sale corriendo porque trabaja solamente por el dinero y, en realidad, no le importan las ovejas.» Yo soy el buen pastor; conozco a mis ovejas, y ellas me conocen a mí, como también mi Padre me conoce a mí, y yo conozco al Padre. Así que sacrifico mi vida por las ovejas.  Además, tengo otras ovejas que no están en este redil, también las debo traer. Ellas escucharán mi voz, y habrá un solo rebaño con un solo pastor.

La palabra nos fortalece, Cristo es el verdadero Pastor y dueño del rebaño, ya que ha venido a regresarnos al Padre, porque sólo Jesús es el único y suficiente salvador que nos saca de las mentiras del mundo, del pecado y nos restaura delante de Dios.

En definitiva, si te sientes perdido, con el vacío de no tener propósito en tu vida, si sientes que no perteneces a ningún lugar, es tiempo de reconocer que Jesús es tu pastor y que necesitas que venga en tu búsqueda y rescate para devolverte al rebaño de Dios. En Juan 10: 27-28 RVR 1960, dice: Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. ¡Ven a Jesús!

Dios Les bendiga.

 

Ana Yajaira Pérez.

lunes, 20 de enero de 2025

Desarrollados en la Fe

Santiago 1: 2-4 NTV. 

Amados hermanos, cuando tengan que enfrentar cualquier tipo de problemas, considérenlo como un tiempo para alegrarse mucho porque ustedes saben que, siempre que se pone a prueba la fe, la constancia tiene una oportunidad para desarrollarse. Así que dejen que crezca, pues una vez que su constancia se haya desarrollado plenamente, serán perfectos y completos, y no les faltará nada.

Cuando nos volvemos a Dios y llegamos a los pies de Cristo, siempre es porque para muchos de nosotros la manera en la que estábamos viviendo no era satisfactoria, sentimos que no estamos viviendo de la manera correcta, en Jeremías 21:8 NTV, Dile a todo el pueblo: “Esto dice el Señor: ¡Elijan entre la vida y la muerte! Como el pecado es muerte y Cristo es vida, tomamos una decisión y es ahí cuando el Espíritu Santo obra en nosotros el convencimiento de pecado, justicia y juicio, y aceptamos a Jesús como nuestro Señor y Salvador.

Así iniciamos nuestra vida cristiana, pero también comienza una transformación, renovación y restauración total tanto a lo interno como lo externo en nosotros y es sobre este proceso en nuestro carácter que el Espíritu Santo nos desarrolla para que seamos parecidos a Cristo como dice Filipenses 2:5 NTV Tengan la misma actitud que tuvo Cristo Jesús, lo que permite el crecimiento de nuestra fe.

El Apóstol Santiago se refiere en los versículos que leímos, a este desarrollo o crecimiento y entre los puntos a destacar están: el verbo enfrentar, Juan 16:33 RVR1960 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo. La alegría por estar en pruebas porque permite el desarrollo de la constancia por la fe, los resultados de este desarrollo serán ser completos, perfectos y tenerlo todo en Cristo.

- Paciencia: Es la capacidad de tolerar o soportar problemas, retrasos o sufrimientos sin angustiarse o enfadarse.

- Constancia: es un conjunto de reglas que se siguen de manera constante para alcanzar un resultado.

- Perseverancia: Es la constancia en la forma de obrar, a pesar de las dificultades o el desánimo.

Por lo que el que pide paciencia, no está pidiendo prueba, sino crecer en fe. La paciencia, la constancia y la perseverancia son virtudes que ayudan a lograr metas y objetivos. Por lo cual estas cualidades desarrolladas en nosotros por el Espíritu Santo. En 2 de Timoteo 1: 7 RVR 1960, Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.

En nuestro diario vivir como cristianos, esto significa que sabemos descansar y confiar porque todo está en las manos de nuestro Dios. Se acabo estar atormentado por las cosas que se escapan de nuestras manos, se acabó la ansiedad de esperar aquello que queremos recibir, se acabó el tener miedo a no poder hacer frente a las circunstancias que se nos presenten, el lenguaje de derrota cambia a un lenguaje bíblico y de victoria, aprendemos a esperar el tiempo de Dios, a creer en el cumplimiento de Sus promesas, a presentar nuestros planes a Dios para obtener el éxito, se acabó la vergüenza por lo que fuimos o hicimos, le hablamos a otros de Jesús y lo más hermoso de todo vivimos por y para Cristo.

Hace unos días estuve de visita en la casa de mi hermano y traté de programar su televisión con la aplicación de un servicio de entretenimiento, que tenía una oferta de dos días para el uso gratis de la misma para que pudiera ver algunas películas que estaban en el cine, trate y falle varios intentos de conectarlo, porque ni se sabían sus correos electrónicos y mucho menos la clave y mi hermano en su ansiedad y desesperación me instaba a dejarlo de hacerlo, pero yo le respondí que tuviera paz en Cristo, porque yo lo lograría, lo que así fue. Después él se pasó todo un fin de semana disfrutando de lo que logre con paciencia y perseverancia.

Esta experiencia me ministro, porque me percate del gran cambio en mí, pero todo esto después que entregué mi vida a Cristo, yo era una mujer de mecha corta o mejor dicho sin mecha, que ahora vive cada día de acuerdo con los planes y propósitos de Dios. ¿Has notado como te ha cambiado Cristo? En 2 Corintios 5:17 RVR 1960 De modo que, si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. Es por esto por lo que nuestro corazón es sanado, nuestra mente cambiada y nuestro carácter transformado, somos nuevos en Cristo.

Siempre debemos recordar lo valioso de nuestra salvación como está escrito en Efesios 2:8-9 NTV, dice: Dios los salvó por su gracia cuando creyeron. Ustedes no tienen ningún mérito en eso; es un regalo de Dios. La salvación no es un premio por las cosas buenas que hayamos hecho, así que ninguno de nosotros puede jactarse de ser salvo. Gracias al Espíritu Santo entendimos este principio y pudimos alcanzar la gracia de Dios, pero hay muchos que se consideran buenos y que no han hecho nada malo y por ende no requieren salvación. Aceptar a Cristo es el primer paso, pero lo que nos hace completamente cristianos es que enfrentamos todo por la fe que tenemos en Él.

En definitiva, tener a Cristo como Señor, Rey y Salvador hace en nosotros un cambio total y pleno. Si aun no has aceptado a Cristo y sientes que tu vida no tiene el rumbo que quizás deseaste tener, este es el momento de venir al único que es el camino, la verdad y vida, Jesús, que puede transformar, renovar y restaurar tu vida, si le invitas a entrar en tu corazón como tu Señor y Salvador.

Toda la Gloria es de Dios. Hermanos y hermanas, Dios les bendiga.

Ana Yajaira Pérez.